EL CARTEL DE LA POLICIA DE JUAREZ A LAS ORDENES DE "ALIAS EL TETO" MURGUIA LARDIZABAL !!!!!!!!!! ASESINOS Y CORRUPTOS PRIISTAS !!!!
EUGENIA BARAJAS
“Pero los planes de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos, de hecho eran otros: impedir a como diera lugar que este personaje arribara al poder, por sus antecedentes”. El personaje: Arturo Zamora; tiempo: campaña a la gubernatura de 2006. Así consigna el libro Narcotráfico: el gran desafío de Calderón, de Alejandro Gutiérrez, donde le dedica un capítulo al hoy consejero nacional del PRI y sus nexos con el crimen organizado. El libro ha sido prácticamente requisado de las librerías.
Cuando al interior del priísmo se enteraron de la publicación y del contenido del mismo, corrió como reguero de pólvora la versión y creció el interés por conocer lo que el autor y periodista plasmó en una investigación sobre seguridad, y en donde en 448 páginas habla sobre el narcotráfico en el país, pero a partir de la 91 le dedica 11 a Zamora Jiménez, con el título Contexto 2006. La DEA en Jalisco. “En 1995 sufrió otro atentado cuando fungía como director de Prevención Social. Un año antes había sido asesinado el reo José Méndez Torres, gatillero del cártel de Tijuana implicado en el homicidio del cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo. Ese año, meses después del atentado contra Zamora, otros gatilleros de esa organización detenidos por el homicidio del ex procurador estatal, Leobardo Guzmán, declararon –el 4 y 5 de septiembre de 1995– que el atentado contra Zamora se debía a que ‘ordenó la muerte de Méndez Torres’”.
“El 13 de septiembre de 2004, Mario Sánchez Paniagua, socio de Zamora en la Notaría, fue ejecutado por un pistolero que viajaba en una motocicleta…hasta antes de su muerte era el principal administrador de los activos de Zamora en la Notaría Pública… que, de acuerdo con una fuente, ha sido utilizada por importantes traficantes de droga para realizar transacciones comerciales y de bienes raíces… establece el documento de la DEA, de fecha 25 de octubre del miso año… representaba una advertencia por sus presuntos vínculos narcopolíticos y el incumplimiento de favores políticos.
“Zamora había conocido a Mireles Félix en 2003, cuando éste aportó fuertes sumas de dinero a su precampaña por la alcaldía de Zapopan. A cambio, el narco demandaba que le beneficiaran con licencias de construcción, de acuerdo con el reporte. Otro beneficiado de las aportaciones de Mireles, Jorge Arana Arana, político del PRI que contendió en 2003 por la alcaldía de Guadalajara, presentó a Zamora con el traficante de drogas… la DEA precisaba que desde la elección de Zamora, él y Jorge Arana se distancian, por lo cual no fue larga su alianza.
“A Zamora, según la DEA, se le ha conocido una estrecha relación con familias del tráfico de drogas asociadas con Rafael Caro Quintero y Juan José Quintero Payán. Las operaciones de los clanes Caro Quintero, Quitero Payán y de Eduardo González Quitarte, un significativo representante de la organización Carrillo Fuentes, se hacían en la notaría de Arturo Zamora. La DEA sostiene que Ramírez Vargas –jefe de la policía zapopana con Zamora– conformó una unidad especial de protección a las operaciones de la Federación de Cárteles, integrada por 12 policías de municipios de Jalisco... los narcotraficantes que recibían protección del grupo de Ramírez eran Ignacio Coronel, El Chapo Guzmán, Juan José Esparragoza, Armando Valencia, Luis Rodríguez Olivera, los hermanos Amescua Contreras, los Caro Quintero y Eduardo González Quitarte.
“En cosa de segundos, el centro comercial se vio rodeado de policías portando armas largas y al verse superados en número, Caro Quintero espetó: qué pasó, por qué nos detienen si ya cooperé y esta vez fue doble para el aguinaldo del jefe; cuando arribó el jefe de la policía de Guadalajara, Felipe de Jesús Gallo, otro de los detenidos insistió en pedirle que los dejaran libres, porque ya habían enviado una gratificación para su papá, por conducto de Rodolfo Ramírez Contreras… comandante segundo… hijo del teniente Rodolfo Ramírez, director de Seguridad de Arturo Zamora”. La investigación en el capítulo de Jalisco, continúa hasta la página 102 de la edición.